Hablar palabras positivas y edificantes crea una realidad superior para ti y para los demás, ya que cada palabra que dices poderosamente crea lo que hablas. Cuando hables con alguien, no comiences contándoles todas las cosas frustrantes que estás experimentando. En su lugar, habla acerca de una nueva idea o descubrimiento que hayas realizado durante el día. Comparte una experiencia positiva que hayas tenido. Si lo haces, elevarás la energía tuya y la de otras personas y establecerás una conexión más profunda.
